
Este imponente edificio industrial funcionó en su día como depósito y planta de tratamiento de agua en Budapest. Aunque ya no está en uso, el complejo no ha cerrado sus puertas por completo. Permanece disponible de forma continua para rodajes y sesiones fotográficas, ofreciendo una localización verdaderamente única. Si bien ya se han realizado algunas producciones en el lugar, esto solo significa que los propietarios están familiarizados con las necesidades específicas de los equipos de rodaje; el lugar en sí conserva todo el atractivo de un escenario aún por descubrir. Su simplicidad brutalista y estilo industrial crudo crean una atmósfera muy particular, lo que lo convierte en una opción perfecta tanto para una campaña de moda atrevida como para servir de fondo temático en una película de espías o una escena de acción.